Emprender y abrir un negocio no siempre es fácil. A pesar de que tengamos conocimientos profesionales o técnicos sobre una materia, gestionar una empresa requiere de muchas otra cosas a tener en cuenta. Así, muchos amantes del deporte quieren dar un paso más y deciden llegar a ser empresarios. Sin embargo, una gran mayoría se pregunta cuánto cuesta montar un gimnasio. No podemos dar una cifra al azar, ya que hay que tener en cuenta una serie de factores antes de emprender esta actividad. Por ejemplo, hay que saber qué tipo de centro deportivo se quiere instalar, cuál es nuestro nicho de mercado o de cuántos metros cuadrados dispondrá nuestro local, entre otros.
Los expertos en este tipo de negocio estiman que abrir un gimnasio puede costar entre los 10.000 euros, si abrimos nuestro propio local, o 500.000 euros en el caso de optar por una franquicia. En función del tamaño, instalaciones, ubicación o tipo de actividades que se quieran incluir, este coste puede variar. De hecho, una de las decisiones más importantes es la situación del gimnasio ya que su coste variará si lo abrimos en un pueblo que en una gran capital.
La visibilidad en una buena zona con tráfico peatonal y rodado también encarece el presupuesto. Debes tener en cuenta que, en la mayoría de los casos, se suele alquilar el local, a no ser que interese hacer la compra como inversión.
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Actualmente hay varios tipos de centros deportivos según algunos de los factores que hemos indicado. Esta es la clasificación más habitual:
Montar un gimnasio es un negocio en auge, pero hay que contar con una inversión mínima para arrancar. El espacio y la ubicación pueden ser el éxito o fracaso de este negocio. Por lo tanto, si eliges una buena zona residencial y con movimiento empresarial, encontrarás mejores resultados.
Si optas por un gimnasio de barrio, no muy grande y con poco tránsito, el coste será mucho menor. Habrá que soportar menos gastos operativos, aunque las ganancias también serán menores. El precio de un alquiler está entre los 6 y 15 euros por metro cuadrado.
Sin embargo, lo más recomendable es adquirir un local de 500 m2 como mínimo y a nivel de calle. Posiblemente, haya que insonorizar o hacer reformas, pero merecerá la pena invertir en ello. Lo ideal es conseguir el traspaso de un local que ya se dedique al mismo negocio.
En los últimos años, han proliferado las franquicias de gimnasios low cost. Esta es otra inversión a considerar según la zona. Normalmente se sitúan en lugares con bastante población. El coste de esta última opción se sitúa entre los 80.000 a 400.000 euros.
En cuanto a los gastos de instalación se refiere, si el local es grande podrás añadir varios ambientes para aerobic, zumba o hacer bicicleta, entre otras actividades. Por lo tanto, el material y el equipamiento dependerá de los deportes incluidos. Estos gastos pueden alcanzar los 100.000 euros. No olvidemos que hay que pensar en un margen para posibles averías, roturas, desperfectos o pérdidas de material.
Asimismo, y dependiendo del nivel de sofisticación deseado, habrá que tener en cuenta otros gastos relacionados con tecnología (2000 euros); iluminación (10.000 euros) los vestuarios (5000 euros) o el mobiliario de oficina (3000 euros).
Además de los costes que supone adquirir el permiso, licencia o certificaciones para la empresa, es necesario contar con entrenadores personales certificados y cubrir sus salarios.
Hay empresarios que optan por contratarlos con un sueldo fijo, mientras que otros, prefieren pagar los servicios a autónomos. Esto dependerá de la política empresarial. Normalmente, los monitores de sala tienen unos salarios que rondan los 1000 euros aproximadamente. Sin embargo, hay profesionales para entrenamiento personal que duplican esta cantidad. Por otro lado, la experiencia y cualificación también cuentan.
Antes de poner en marcha una actividad empresarial, lo recomendable es contar con un plan de negocios. Por muy buena que sea la idea, la ubicación, las instalaciones o los monitores, este estudio es fundamental para valorar los pros y contras a la hora de montar un gimnasio.
En primer lugar, hay que pensar en definir la idea de negocio y dar un valor diferencial frente a la competencia para tener más garantías de éxito. Actualmente, las franquicias tienen mayor tasa de supervivencia. La imagen de marca y el estudio de marketing que las avala son de gran ayuda.
Por último, además de identificar la competencia y conocer cómo opera, hay que definir el esquema de funcionamiento del gimnasio, la metodología, el tipo de entrenamiento, la maquinaria que se va a usar, etc.
Esperamos que con estos detalles tengas más claro cuánto cuesta montar un gimnasio. Es una idea muy atractiva que tiene muchas salidas, sin embargo, no todos los negocios ofrecen los mismos resultados.
Por esta razón, contar con un buen asesor puede ser de gran ayuda antes de dar un paso que suponga un riesgo innecesario. ¡No dudes en consultarnos! Te ayudaremos encantados.
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